De buzón a buzón 345‏

PROMESAS POLÍTICAS, COMO EN CAMPAÑA

   A la mitad de su sexenio, el gobierno de la República no sólo no ha cumplido ninguna de sus promesas de campaña, sino procedido en contra, o sea que todo su programa de trabajo lo ha realizado en perjuicio de la población, con el apoyo de todos sus colaboradores y del Congreso de la Unión. Ahora, para cerrar el año, se ha alcanzado la puntada de anunciar para el año próximo la baja en los precios de las gasolinas y el diésel, pero no como lo vende en el vecino país del norte, sino en la risible cantidad de 40 centavos. Se anuncia que durante 2016 seguirán bajando estos precios, pero en centavitos y sólo para justificar la también anunciada venta de las refinerías de Petróleos Mexicanos de Tula, Hidalgo; Salamanca, Guanajuato, y Salina Cruz, Oaxaca. O sea que son engañosas las promesas que se siguen haciendo, que ya no son de campaña sino de poder, que ha significado poder entregar las riquezas nacionales en manos de extranjeros. Sin embargo, según el breve balance hecho por Enrique Peña Nieto de sus logros obtenidos este año le resultan abundantes, todos en beneficio de la nación. El único error que reconoce de su gobierno es la fuga de El Chapo Guzmán, algo que a la población no le interesa, salvo al pequeño sector al que ayudaba económicamente, que fue el que celebró que se le haya dejado escapar.

   Otra promesa que ha quedado en duda es el apoyo a las instituciones académicas, culturales y artísticas con la creación de la Secretaría de Cultura, pero lo que hasta la fecha se ha realizado es el cambio de nombre al Conaculta, institución encargada de la distribución de becas y fomento de la cultura y las artes, a la que previamente se había reducido el presupuesto, pero que ahora crece en cuanto al burocratismo y con un futuro incierto, porque también se había reducido el presupuesto a las universidades. En cuanto al aspecto político, se había asegurado que con la reforma electoral habida este año disminuirían los gastos en este rubro, pero ya se programa que en las 13 elecciones locales ordinarias que habrá en 2016, se incrementarán considerablemente los costos, sobre todo en los crecientes recursos solicitados por los organismos públicos locales, que ascienden a seis mil 56 millones de pesos, de los que dos mil 58 son para los partidos políticos, más 1,307.7 millones para gastos del Instituto Nacional Electoral, mismos que solicitó al Congreso de la Unión, supuestamente para evitar deudas. Desde luego que se trata de partidas extraordinarias, porque el presupuesto asignado a ese instituto político y los subsidios a los partidos ya fueron aprobados con anterioridad.

   El gobierno federal ha insistido mucho en la estabilidad económica, en que se ha reducido la carrera precios salarios y en que la crisis mundial no nos ha afectado, sin embargo este año los precios de los productos de la canasta básica  y de las medicinas se incrementaron entre el cinco y el 17 por ciento, de acuerdo con cifras oficiales dadas a conocer. En cuanto al nivel internacional, más de 55 mil 800 millones de dólares, de origen oscuro, salieron del país en los primeros tres años de la actual administración gubernamental, según informes de la balanza de pagos elaborada por el Banco de México sobre ingresos y salidas de divisas del país por conductos formales e informales de la economía. Esta es la salida más alta de divisas en comparación con sexenios anteriores, y sólo por la mitad de lo que va de este, a pesar de las declaraciones oficiales en cuanto al cuidado de fugas de capitales, cualquiera que sea su origen, como también se ha afirmado en los foros internacionales, tan frecuentados por el habitante en turno de Los Pinos. Como comentó un dirigente perredista, la clase política se mantiene ausente en indiferente frente a esta situación. “Poco o nada parece preocupar a Enrique Peña Nieto que dos de cada tres mexicanos rechacen su gestión, como tampoco parece ser del interés de las partidocracias que los partidos políticos  y las cámaras de senadores y diputados sean las instituciones peor calificadas en la valoración ciudadana sobre su desempeño”.

   De igual manera, la bancada perredista del Senado lamentó que el país haya perdido competitividad, aun cuando uno de los ofrecimientos de campaña de Peña Nieto fue avanzar en este rubro: “En 2012 México ocupó el lugar 53 de 144 países en el Índice Global de Competitividad que calcula el Foro Económico Mundial. Para 2015 perdió cuatro sitios, al ubicarse en el 57. Lo más grave es que también su calificación se redujo de 4.36 a 4.29.” Asimismo, en cuanto al sector laboral, en los tres años que lleva este gobierno, las centrales obreras advirtieron que no se han creado empleos a los niveles prometidos, al tiempo que México sigue siendo el país con la mano de obra más barata de los que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, pues tiene los sueldos mínimos contractuales más bajos.

   Oaxaca no se queda atrás. Las promesas de campaña siguen pendientes, mientras entre las nuevas figura la terminación de las súper carreteras a la Costa y el Istmo, que llevan varios sexenios en las mismas condiciones, y que es imposible su terminación en pocos meses, igual que el prometido Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca. Por otro lado, el director del IEEPO informó que se quedó sin fondos y que requiere 34 millones de pesos para el pago de “laudos” y bonos para jubilados y pensionados, por lo que ha solicitado al Congreso local le apruebe esa suma, con la que se elevará más la deuda pública. Es increíble el saqueo económico a ese instituto magisterial.

   abelsantiago30336@yahoo.com.mx