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MÁS ATENCIÓN EN POLÍTICAS PÚBLICAS PARA COMBATIR LA INSEGURIDAD

MÁS ATENCIÓN EN POLÍTICAS PÚBLICAS PARA COMBATIR LA INSEGURIDAD  

Por: William Hundelshauseen Carretero

Presidente Nacional APIC

Para  entender  la  magnitud de la inseguridad en Cartagena, es necesario comprender que no solo afecta la tranquilidad y seguridad de la población, que sería un factor más que suficiente para combatir este fenómeno, además la inseguridad atenta contra los intereses de los habitantes de esta población, perturbando la inversión local como extranjera, nadie quiere invertir en ciudades violentas, el turismo se ve seriamente afectado también por este fenómeno, Sin duda las respuestas de la mayoría de las Instituciones de seguridad pública, en la ciudad no  son  las  adecuadas,   en    mi opinión es perentorio el ordenar y repotenciar estas instituciones, además paralelamente a los efectos se deberá trabajar las causas, no hay otro camino, la voluntad política deberá ir de la mano con los recursos económicos adecuados y con un estricto mecanismo de control, por ello es que es muy difícil la lectura de la problemática de inseguridad por parte del Gobierno Distrital ya que es indiscutible, que el plan de desarrollo de cualquier territorio es el principal instrumento de planificación de las principales políticas públicas que no solo definen el modelo económico de la ciudad, sino también, en la destinación de los recursos públicos para solucionar las problemáticas sociales existentes en la misma. A escasos 4 meses de haber tomado las riendas del Distrito de Cartagena MANUEL VICENTE DUQUE “MANOLO”, con las ganas de salir adelante y dejar atrás las armas y la violencia, jóvenes de 16 barrios de la ciudad decidieron tomar el control de sus vidas y reintegrarse a la sociedad a través del deporte, buscando la paz y que no existan más fronteras invisibles, riñas, intolerancia ni violencia sin sentido; en su balance de 100 días, el alcalde reiteró su compromiso de darles educación y oportunidades a las adolescentes de los barrios más vulnerables, que hoy en día están expuestas a embarazos no deseados y a prácticas que van en contra de su dignidad como seres humanos y el compromiso con Cartagena de entregarle seguridad a sus barrios, se comprometió hacer trabajo de resocialización y oportunidades para los jóvenes que hoy engrosan las filas de la delincuencia,  pero en la práctica y como víctima de la inseguridad que conmueve al corralito de piedras podría calificar de mínimas a nulas o peores, las mejoras en seguridad,  no se ha podido dar cumplimiento ni con el mínimo porcentaje. A  120 días de la posición del alcalde MANOLO y puesta en marcha del programa Reconstrucción del tejido social que autoridades Cartageneras implementaron y plasmaron en un cuadernillo, lamentando que en el balance de los 100 primeros días esas mismas autoridades no han hecho nada o al menos eso se nota públicamente para reducir la inseguridad que no permite a las familias deambular tranquilas por las calles de sus barrios y mucho menos sentarse en la puerta de su casa porque son víctimas de motorizados que con arma en mano le piden todo lo que tenga a cambio de su vida. Por eso el programa de gobierno de cada persona que quiere gobernar, es uno de los instrumentos fundamentales para el fortalecimiento de la democracia y la promoción del desarrollo, es el punto de partida de la relación entre quienes aspiran a ser gobernantes y las comunidades. Por tanto, es un instrumento con relevancia política y técnica. En la administración de DIONISIO no se le dio cumplimiento y no sabemos si en esta se cumplirá con una de las elementales normas para combatir la INSEGURIDAD en Cartagena, por no dársele acatamiento en el marco del control social, los ciudadanos deben evaluar el cumplimiento del programa de gobierno, para que no se repita la triste historia anterior qué el alcalde incumplió los compromisos adquiridos. Porqué proyectos como el que pregonan en sus campañas proselitistas sobre regeneración del tejido social sean exitosos,  se requiere de mayor atención y recursos constantes que por el contrario fueron disminuidos en casi un 70 por ciento en la alcaldía de VELEZ y la misma suerte al parecer lleva en esta administración, por eso no se ven a las autoridades encabezando los programas para que los resultados se comiencen a ver en los Barrios de mayores riesgos. Además, la elaboración de los planes debe ir de la mano de los ciudadanos que padecen la inseguridad, que son quienes conocen los problemas en sus barrios: “Una cosa es que te involucres y otra cosas es ‘que te hagan participe y tengan en cuenta tus propuestas para darle seguimiento y continuidad” y no reprimir y desmovilizar la acción legítima de los seres humanos utilizando estrategias de manipulación, terror y represión trayendo consigo la Inseguridad escondiendo las consecuencias inmediatas. La creciente delincuencia es sólo el resultado lógico de los altos índices de desocupación y de marginalidad. Convirtiendo este crimen social en sólo un problema de vigilancia, un tema de policía. Hay una complicación aguda, la ciudad está en cuidado intensivos, en los barrios populares día a día crece el pandillismo, el sicariato que sigue cobrando víctimas, la deserción escolar, los jóvenes no asisten a sus clases porque falta una política pública clara de educación, los robos, atracos, están en el orden del día. Por eso, MÁS ATENCIÓN EN POLÍTICAS PÚBLICAS PARA COMBATIR LA INSEGURIDAD. 

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