Vacaciones de lujo mientras Almoloya de Juárez se hunde

Vacaciones de lujo mientras Almoloya de Juárez se hunde

Por El Chocorrol 

Almoloya de Juárez, México. – En un municipio donde los servicios básicos fallan y los camiones de basura no reciben pago, #EricJiménezSolís primo hermano del presidente municipal #AdolfoSolísGómez se da la gran vida en Cancún. Una semana completa de descanso mientras la ciudadanía se enfrenta a calles sucias y promesas incumplidas.

Este coordinador de compras no solo se ausenta de sus responsabilidades, sino que lo hace amparado por su parentesco. Un claro ejemplo de #nepotismo descarado: mientras los habitantes luchan por lo más elemental, los familiares del presidente municipal gozan de privilegios, viajes y gastos personales que podrían pagarse con recursos públicos.

Lo peor no es solo su ausencia, sino lo que representa: un patrón de impunidad y favoritismo que permea toda la administración. En Almoloya de Juárez, los regidores parecen fantasmas, y la supervisión de los recursos es casi inexistente. Los ciudadanos quedan a merced de decisiones arbitrarias, mientras quienes deberían rendir cuentas se esconden detrás de relaciones familiares.

Cada día que pasa sin que alguien intervenga, se confirma que la administración prioriza intereses personales sobre el bienestar común. Eric Jiménez Solís es solo la punta del iceberg de un gobierno que premia la lealtad familiar y castiga la honestidad y el trabajo. La población observa, denuncia y protesta, pero la falta de transparencia y responsabilidad mantiene intacta la maquinaria de privilegios.

Esta situación no es casual ni aislada. Es la manifestación de un sistema donde los familiares son intocables y la ciudadanía es relegada. Mientras unos disfrutan del lujo y la protección, los demás pagan las consecuencias: calles sucias, servicios fallidos y recursos que se pierden en gastos innecesarios.

Almoloya de Juárez necesita un cambio urgente, una administración que ponga a los ciudadanos primero y no a los familiares del presidente municipal. Hasta que eso ocurra, casos como el de Eric Jiménez Solís seguirán siendo el símbolo de una gestión incapaz y parcial, donde la impunidad y el favoritismo familiar pesan más que la justicia y la eficiencia.