SON NECESARIAS ACCIONES SENCILLAS PERO EXTRAORDINARIAS A FAVOR DE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD ANTE LA PANDEMIA DE COVID-19
Toluca, Estado de México, 29 de marzo de 2020.- Ante la pandemia de Coronavirus COVID-19 que se vive en estos tiempos y la propagación a nivel mundial de persona a persona por vía respiratoria y contacto directo, quienes tienen familiares, amigos, vecinos o conozcan a alguien con discapacidad, pueden apoyarlos para que ejerzan su derecho a la información, a la no discriminación y a la protección de su salud.
Para evitar contagios de personas con discapacidad, se requieren medidas extraordinarias porque en su mayoría necesitan ayuda para comer, vestirse o realizar actividades cotidianas dependiendo del tipo y grado que enfrentan, señaló la jefa del Departamento de Atención a las Personas con Discapacidad de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), Ana Karen Vargas Esquivel.
Explicó que la Relatora Especial sobre los Derechos de las personas con discapacidad de la Organización de las Naciones Unidas, Catalina Devandas, precisó algunos ajustes razonables esenciales para reducir el contacto y el riesgo de contaminación, que incluyen también a los familiares y cuidadores.
Por ejemplo, solicitó que a las personas con discapacidad que tienen trabajo de oficina, se les permita hacerlo desde casa y reciban licencia o permiso con goce de sueldo para garantizar sus ingresos; también propuso que los familiares o cuidadores reciban un permiso con goce de sueldo durante la cuarentena, que les ayude a solventar los gastos económicos.
Algunas recomendaciones de la agencia de la ONU, son que la información sobre la pandemia COVID-19 sea inclusiva, estar disponible en lengua de señas, que su lectura sea fácil y usar la tecnología para garantizar que llegue a la población en general.
Otra medida es proporcionar apoyos económicos adicionales para reducir el riesgo de que dichas personas y sus familias caigan en la pobreza o situación de mayor vulnerabilidad; además garantizarles que su supervivencia es una prioridad, para lo cual las autoridades deben establecer protocolos para emergencias de salud pública.
Por último, la especialista de la Codhem, mencionó que las medidas extraordinarias a implementar dependen del tipo de discapacidad: en el caso de la motriz, esterilizar o limpiar sillas de ruedas, bastones y muletas; para la auditiva, garantizar el derecho a la Información accesible, utilizar la lengua de señas mexicanas (LSM), subtitulado o audio descripción, en cada comunicado oficial.
Las personas con discapacidad visual, deben tener acceso a la información con el uso del sistema braille; y quienes tienen síndrome de down y otras discapacidades intelectuales, aprender las medidas de prevención a través de infografías, dibujos y videos, que les ayuden a conocer hábitos para seguir con la autoprotección frente al COVID-19.
Respecto a las personas con discapacidad psicosocial que reciben tratamiento farmacológico se debe validar si no tienen efectos secundarios con el de combate al COVID-19.
Por último, la también secretaria ejecutiva del Comité Técnico de Consulta del Mecanismo Independiente de Monitoreo del Estado de México (MIMEM), dijo, que los principales responsables para que aprendan serán los padres de familia o los parientes en el caso de adultos.