Desconfianza y tensión por inseguridad en los habitantes de los barrios de Cartagena
Desconfianza y tensión por inseguridad en los habitantes de los barrios de Cartagena
Por: William Hundelshauseen Carretero
Presidente Nacional APIC
La seguridad pública, derecho fundamental, condición básica de la convivencia, sigue afectando al Distrito de Cartagena. Todos mostramos gran preocupación por los hechos violentos que día a día afectan y perturban la tranquilidad social en las calles, en la casas, en los bancos, en fin casi en todas partes, La heroica, desde hace rato dejó de ser lo que antes era, paraíso de la tranquilidad, territorio de convivencia, sin que se observen soluciones a la vista, eso sí muchos discursos, promesas y reuniones de seguridad. El resultado, que la vida, honra, y bienes de los cartageneros siguen amenazados, Cartagena se ha vuelto una ciudad peligrosa e insegura, la transversalidad de las soluciones brillan por su ausencia, lo urgente ni siquiera es atendido con eficiencia, lo estructural muchos menos, no hay políticas de seguridad urbana sostenible, por ello muchas formas de violencia se han tomado la ciudad, al punto de asesinar a 3 servidores públicos encargados irónicamente de la seguridad en la Y de Olaya; el intendente Ciro Duarte Herrera, el patrullero Naicir Sayas, y el auxiliar bachiller Miguel Ángel Batista Montalván. La causas de la violencia en Cartagena son suficientemente conocidas, estas son un verdadero coctel atómico, que van desde la pobreza, la miseria, los negocios ilícitos, el consumo de drogas y alcohol, la intolerancia social, la pérdida de la autoridad familiar y la pérdida de principios y valores, propios de un Estado y de una sociedad en crisis, trayendo consigo Desconfianza y tensión por inseguridad en los habitantes de los barrios de Cartagena. La inseguridad sigue siendo uno de los problemas más difíciles de erradicar, en las últimas semanas se han presentado diversos casos de SICARIATO como los ocurridos a: David Santos Taboada, baleado cuando estaba en la terraza de una tienda, en la calle Santander del barrio Lo Amador; Luis Alfonso Cardales Zúñiga, fue atacado a balazos en el barrio Nuevo Bosque; el mototaxista Henry Alberto Schotborgh Pájaro, un sicario lo asesino en el barrio El Carmelo; el comerciante Julio Alberto Rodríguez Díaz fue la persona muerta y otra herida dejó el ataque de pistoleros en La María y La Campiña; Jesús Antonio Rendón Granada y Samir Alfonso Gómez Palacio, los dos hombres fueron víctimas de atentados en los barrios El Pozón y Nuevo Bosque; Greyson Manotas Salguedo, fue asesinado junto a los hermanos Dherian René Gutiérrez Godoy y José Ángel Hernández Gutiérrez, en la calle La Sonrisa del sector Simón Bolívar; Luis Fernando Machacón Babilonia, lo asesinaron en la invasión 20 de Enero; Cristian Laureano Ballesta Ibarra, fue baleado por un sicario mientras estaba dentro de su carro, en el barrio Bruselas; Orlando Mercado Jiménez fue asesinado en la invasión 3 de Junio; en El Pozón ultimaron a Ángel Herrera Flórez; José Ríos Ramírez murió luego de recibir un balazo en la cabeza, en Olaya Herrera; Deivis Herrera lo matan en Caño del Oro; en Ceballos asesinan a Alejandro Jaramillo; en Daniel Lemaitre fue asesinado Richard Ahumada, etc., De igual manera se incrementaron los robos, aumento acelerado de las pandillas;
que comprueban la situación por la que estamos pasando actualmente y alerta a las autoridades sobre las medidas que se deben tomar. Medidas que a pesar de muchas estrategias y reuniones que se han realizado siguen sin dar resultados positivos. ¿Es una película de terror? NO, desgraciadamente: es la historia diaria de miles de cartageneros que han perdido sus bienes y algunos hasta la vida por culpa de estos delincuentes. Ante todo, está también detrás un sentimiento que ha llegado a ser uno de los más costosos para la sociedad: EL MIEDO. Estos problemas de inseguridad son causados por la ausencia de oportunidades para la gente de escasos recursos, quienes diariamente conviven con el desempleo, hambre, discriminación, drogadicción y vulneración de su dignidad, mientras las personas encargadas de buscarle una solución a estos casos, viven en su mayoría arropados de la corrupción, cuyo inconveniente a esta problemática social es la “INVISIBILIDAD” por parte del Estado, .la corrupción de estos funcionarios de gobierno que roban o no cumplen con su trabajo, que se llevan el dinero de los impuestos en vez de gastarlo en obras públicas y proyectos para mejorar la calidad de vida de ese cordón de miseria que rodea el distrito hacen que este tipo de acciones no permiten que se progrese como debería ser constitucionalmente. Cartagena ha sido una ciudad desde la colonia construida sobre infamias y hechos violentos estamos sumergidos en un diario vivir de zozobra y angustias, producto de esto estamos siendo víctimas de uno de los fenómenos más desastrosos de las grandes ciudades que es la inseguridad, que ha venido desarrollándose de forma exponencial en nuestro diario vivir, Quien de nosotros no ha sido víctima o alguno de nuestros seres más cercanos, de alguno de los flagelos y modalidades de la inseguridad y nos hacen más vulnerables diariamente a una sociedad donde el atraco, la extorsión, el robo, el abuso y hasta el homicidio son los peligros que más nos acechan diariamente, por eso existe, Desconfianza y tensión por inseguridad en los habitantes de los barrios de Cartagena.
