¡AYUDAAAA: LA CAMPAÑA NO DESPEGA!
¡AYUDAAAA: LA
CAMPAÑA NO DESPEGA!
*O lo que es lo mismo: ¡Tierra llamando a Lunave… Tierra llamando a Lunave… Lunave, responda!…
Por Ernesto Alonso López / CriticaPolitica.MX
Clavillazo fue un gran cómico del cine nacional mexicano y siempre que veo un problema en ciernes, me acuerdo de la escena donde desde la Tierra se comunican con la nave espacial “Lunave”. De ahí viene esa frase que recuerdo: “¡Tierra llamando a Lunave… Tierra llamando a Lunave… Lunave, responda!…” Y “Lunave” nada que respondía. Viene esto a cuento porque como si fuera película de ciencia ficción, al estilo mexicano, pues ya estamos en medio de la campaña, señora candidata, señor candidato… Y usted apenas siente que el mundo lo toma en cuenta. Es más, le están llamando desde la Tierra, pero usted sigue en su “Lunave”; sin embargo, déjeme recordarle, pues es mi deber advertirle, que ahí viene el 7 de junio y usted ya se dio cuenta de muchas cosas y de muchas caras. La mayoría lo tolera, le sonríen, le dicen que van a votar por usted, pero ojo: casi nadie de ellos en realidad lo hará, si su candidatura no les resuelve al menos un problema en su vida a esos cientos que ya ha visto hasta el momento. Mire, es muy sencillo: el pueblo ha aprendido a mentir porque también le dicen mentiras diariamente, así que amor con amor se paga… ¿Pero de qué le sirve saber esto a usted, si lo que quiere son votos?… Tiene razón: de nada. Pero le permite sentarse en una realidad: el día de la elección sólo habrá una campaña que gane, las demás van a perder. Así es. TODAS las demás van a perder. ´SÓLO UNA GANA… ¿Será su campaña la ganadora?…
Por si esto no le causara mucha ansiedad, usted mira, sin decir mucho para que no se note ese desespero que lo trae estresado, quizás con dolor de estómago, sin comer bien, soportando toda clase de actitudes, usted ve cómo los recursos económicos escasean y ponen en peligro sus planes, además la gente que le ayuda a usted algo percibe y en lugar de enfrentar a los demás, se han puesto unos contra los otros para defenderse cual si fueran ciudades Estado; así es, el fuego amigo y un sinfín de tonterías sin sentido se están dando y cuando mucho usted apenas puede opinar, poner un poco de orden y quizás lograr algún acuerdo, pero sin duda que usted no siente que las cosas van tan bien como lo que usted dice en sus discursos.
Encima de todo lo anterior, todavía usted tiene usted que ignorar sus propios sentimientos e irse a encontrar a los electores en cada actividad y convencerlos que usted es mejor que Supermán, que el mundo siempre será mejor mientras voten por usted y que la vida siempre nos da la oportunidad de ser mejores, siempre y cuando voten por usted, pero realmente usted, muy en su interior, siente que las cosas no andan bien y eso le pone a usted nervioso, a veces enojado, como cuando estaba chamaquito y que nada le salía bien… ¿Qué hacer?…
Primero, como dijo Kalimán: serenidad y paciencia. Segundo: RES-PI-RE. Tercero: Otra vez, serenidad y paciencia, vuelva a respirar y repita. Ya que se calme un poco, por favor analicemos qué está pasando…
Bueno, ¿qué ocurre?… Esto es muy simple de responder. Resulta que su campaña quizás no está despegando. Puede haber muchas razones, pero estas son las principales: la información que usted brinda a los electores no es la adecuada. Los electores no le entienden a lo que usted dice y además la gente anda muy metida en sus propios asuntos como para andarle poniendo demasiada atención a usted. Si, ni modo. Es la verdad. Claro que hay personas que de verdad quieren apoyarlo, pero generalmente no son la mayoría, si usted no les representa un beneficio a ellos para resolverles ciertos problemas de la vida. Así de crudo. Ni modo.
Luego, su campaña anda floja porque la movilización de las brigadas tiene a líderes que se andan peleando entre ellos por quedar bien con usted y se les olvida que el 8 de junio muchos van a tener que rendir cuentas claras. Mientras, con esas luchas bizantinas lo que se está jodiendo es su campaña y obviamente su oportunidad de ganar.
Un problema grave que usted nota es que la gente no quiere cooperar ni siquiera escuchándole bien, porque la persuasión que usted trae simplemente no es la adecuada. ¿Qué está haciendo con el líder social a su lado, que tiene cara de delincuente, cuando usted se acerca a pedirle el voto a una humilde madre de familia que va de salida al mercado con su bebé en brazos?… ¿Se imagina el susto que le dio a la pobre señora?… ¿Y de qué hablaron?… ¿De cómo México puede ser un gran país si usted llega a la diputación federal?… ¡Ay, por favor!… Si usted no llega, de todos modos México seguirá siendo un gran país… Además, la señora tiene prisa, apenas trae para lo indispensable, va preocupada porque los huevos, la carne, la leche, porque todo está muy caro y no alcanza ni para mal comer… ¿Y usted llega a decirle a esta señora que las políticas neoliberales han jodido al país y que ella tiene el poder de cambiar a México, haciéndolo a usted un diputado, votando por usted?… ¿Y eso qué le importa a ella?… La señora quiere que HOY le sirva de algún modo… De perdida que empatice con los problemas de las personas, pero diciendo cómo los va a resolver para ayudarla a ella… ¡Caramba, sea más razonable!… Si hasta ahorita no lo han agredido verbalmente o le han tratado con violencia, ha corrido con mucha suerte… ¿Qué quiero decir?… Piense en los demás… Que su campaña sirva a los demás, aunque todos sabemos que la diputación será suya, también el sueldo y si usted quiere hasta los abusos que se cometen en el nombre de la patria. OJO…
Otra cosa que usted trae metido con algo de rencorcito es a la prensa, radio, tv, internet, redes sociales, lo que sea, etcétera… ¿Que si por qué?… Ah, es que usted piensa que la prensa nomás se fija en lo malo y no en lo bueno. Incluso ha querido reclamarles a los reporteros pero mejor se calla porque también siente como que se le van a echar encima y algunos reporteros, usted ya se dio cuenta, son realmente muy persistentes y maestros en el arte de reventarle la paciencia, porque es ahí donde usted da la nota que el medio de comunicación necesita.
Incluso, en medio de este caos bien organizado, usted piensa: cómo van votar por mí, si las diferentes estrategias y sus condicionantes se están aplicando de manera deficiente entre los generales de mi campaña, porque la planificación, simplemente anda mal planificada y la agenda de medios es casi espontánea y como ya dijimos su mensaje es disperso. Un día dice una cosa aquí, otra allá y así se va… ¡AY, AY, AY!… Res-pi-re… Tranquilidad y calma…
¿Y entonces?
Pues ya se lo dije hace varios artículos, mucho antes de que siquiera supiera si iría en alguna candidatura… El punto nodal de su campaña no está en su carisma, ni en su ropa, ni en su equipo, ni en las mejores estrategias… Todo eso se puede ir al caño del drenaje si usted no logra, así, si usted no logra hacer que los ciudadanos enciendan el interruptor de “voy a votar por usted”…
Tanto usted como todo su equipo tendrán que ponerse como meta que logren convencer a las mentes de los ciudadanos que voten por usted, pero si por alguna razón usted es percibido como una amenaza por el cerebro de la gente, cuidado, porque va directo al fracaso y al estrepitoso ridículo.
La función de la mente humana y nuestras partes orgánicas esenciales es mantenernos vivos, sanos y salvos. Si usted no me parece eso, usted no tendrá mi voto, así de simple actúa el votante.
Y recuerde: sólo una campaña electoral va despegar a todo motor. Las demás, poco a poco, van inclinándose de tal manera que algunas incluso de van de pique y se despedazan.