Artículo de Abel Santiago. De buzón a buzón 348
MAGISTERIO Y CLASE POLÍTICA CONTRA OAXACA
El diario La Jornada, reconocido como periódico de izquierda, en varias ocasiones se ha apartado de la verdad al informar sobre las actividades de los grupos llamados luchadores sociales, dándoles siempre la razón, aun cuando por las fotografías que publica se demuestren los actos de barbarie y vandalismo que cometen, como en el caso de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, sección 22, que nuevamente quiere levantar el vuelo agresivo contra el gobierno y el pueblo oaxaqueños. Cuando informó sobre el pretendido asalto de la dirigencia de este gremio al Palacio de Gobierno, que también incluye el Museo de la Diversidad Cultural, cabeceó: “Policías lanzan gas a docentes frente al Palacio de Gobierno-Gabino Cué cierra la puerta a maestros que acudieron a entregar pliego petitorio”. Después, en el texto, dice que profesores de la CNTE intentaron ingresar al recinto oficial para entregar un pliego petitorio, después de su marcha de la fuente de las ocho regiones hasta el Zócalo de la ciudad, para lo cual solicitaron el ingreso de una comisión que sería encabezada por el secretario general, Rubén Núñez Ginez, pero que se les negó el acceso; que intentaron entrar a empujones, pero que los policías los contuvieron y cerraron la puerta arrojándoles gas pimienta.
En el texto de la información se transcriben las declaraciones del borrachín Núñez Ginez, en las que refiere que “en reiteradas ocasiones el mandatario ha señalado que para sentarse a dialogar necesita un documento en el que le señalemos los temas para saber sin son de carácter local o federal”. Dijo que en el documento se pide nuevamente la aprobación de la iniciativa de Ley Estatal de Educación Pública, que ellos mismos elaboraron adaptándola a sus intereses económicos, y que dice fue entregada desde septiembre de 2014, pero que fue enviada a “la congeladora” por el Congreso local. También se solicita en el documento la libertad de los profesores delincuentes que se encuentran en prisión desde el pasado 28 de octubre. A esos detenidos se les lleva un proceso legal, junto con los que deberían estar Núñez Ginez y parte de su banda, contra los que existe orden de aprehensión, pero que no se ejecuta por cuestiones políticas.
La información publicada en otros diarios independientes es que miembros de la sección 22 intentaron ingresar por la fuerza al Palacio de Gobierno, generando un enfrentamiento con elementos de seguridad que resguardan el inmueble porque les negaron la entrada, lo que motivó que los dirigentes, encabezados por Rubén Núñez Ginez, retiraran las vallas del corredor y volvieran a intentarlo con mayor agresividad, pero no lo lograron a pesar de haber retenido a un elemento policiaco. Por esa actitud la policía tuvo que hacer uso del gas lacrimógeno que portaba entre sus herramientas de trabajo, que dispersó por momentos a los atacantes. En seguida realizaron un mitin frente al Palacio de Gobierno, reiterando sus amenazas de intensificar su lucha hasta lograr que se apruebe su ley educativa estatal y se libere a sus “presos políticos”. Es importante recordar que una vez más se aproxima la famosa revisión del pliego petitorio magisterial, lo que ha sido motivo de intensas jornadas en contra del pueblo oaxaqueño, al que agreden alevosamente con el cierre y asalto a establecimientos comerciales, bloqueos a centrales camioneras y aeropuerto, toma de gasolineras, casetas de peaje, calles y carreteras, por lo que es necesario prepararse para no permitir nuevos daños a la sociedad.
Por lo que respeta a la clase política, es ahora el Congreso del estado el que insiste en hacerse notar, no sólo por su improductividad, la grilla permanente en que se encuentran sus miembros buscando ya nuevos acomodos, sino por su desmedido afán de lucro. Información periodística reciente da a conocer que cada uno de los 42 diputados cuesta al erario 53 mil pesos por cada una de las sesiones a las que asisten, aparte de su elevada dieta mensual, bonos, gastos de representación y prestaciones de rigor. Estos señores tienen un rezago de más de 300 iniciativas sin dictaminar, entre las que figura la educativa, que no han tocado a pesar de la llamada de atención que recibieron por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. En la información periodística también se comenta que entre el personal de la Cámara de Diputados hay inquietud y molestia, porque antes de la aprobación del paquete fiscal correspondiente a este año, cada diputado recibió más de un millón de pesos para avalarlo, y que condicionan su voto a la firma de un pagaré por 100 millones de pesos, de los que a cada uno corresponden 2.3 millones de pesos. Sólo como muestra se da a conocer que el sueldo promedio que reciben mensualmente es de 142 mil pesos, más las prestaciones ya señaladas, pero aun así el trabajo legislativo no avanza. No se sabe si por temor al magisterio o por negociaciones económicas, a punto de salir se siguen negando a armonizar la ley educativa estatal con la federal. Sería vergonzoso que se les despidiera antes de cumplir su periodo por no acatar la disposición del más alto tribunal de la República.
Por su parte, el gobernador Gabino Cué Monteagudo anticipadamente se ha sumado a la anticonstitucional disposición presidencial de respaldar el mando único policial, violando la autonomía municipal, como se está haciendo en otras entidades. Otro punto desfavorable a este gobierno, que robustece más a la oficialidad en las próximas elecciones y anticipa el fracaso de los partidos llamados de oposición. Lo peor de todo es que en el partido oficial hay el peligro de un continuismo de la mafia gubernamental priísta, por lo que sólo la decisión ciudadana podrá detener el avance del caos que vivimos en la actualidad.
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