El expresidente Andrés Manuel López Obrador hizo un cogobierno con ellos, les proporcionó la construcción de obras, como el aeropuerto, tren maya, hospitales, les dio la administración de las aduanas y aeropuertos. Hoy en día los militares tendrán un partido y todas las ventajas de ley para abordar la vida política en México.
Hace algunos ayeres escribí acerca del poder que López Obrador daba al Ejército; parecía que tenía un cogobierno con ellos, muchos privilegios, contratos, concesiones como si fueran una empresa civil, poder y dinero. Pero lo que La Mayoría Silenciosa no anticipaba, es el otorgamiento de un partido y las reformas necesarias para que puedan ser candidatos a puestos de elección popular, situación que hoy en día va muy avanzada.
Por un lado, los diputados de Morena aprobaron una ley que permite a los militares pedir licencia para competir por cargos de elección popular, incluso obtener puestos en las administraciones de los tres órdenes de gobierno, obvio con el visto bueno del gobierno federal.
Con anterioridad, las leyes electorales, permitía a los integrantes de las fuerzas castrenses participar en la vida política del país, siempre y cuando lo hicieran después de determinados años de haber dejado el Ejército, restricción que tiene el clero y otros funcionarios.
Muchos han de pensar qué partido le dará una candidatura a un militar o cuántos militares pueden obtener esas candidaturas, no es necesario que toquen puertas, porque hay una asociación civil que tiene autorizado iniciar su proceso para convertirse en partido político, Pacto por la Libertad y la Unidad Social (PLUS), o sea que, los militares también tendrá un partido político, o al menos así me lo han comentado dos personas cercanas a la organización, aseguran que tienen la aprobación del gobierno nacional para convertirse en partido político y competir en las elecciones del 2027. Y hacen énfasis en que el partido pertenece a las fuerzas castrenses.
Sería importante saber, qué le debe el expresidente Andrés Manuel López Obrador a las fuerzas castrenses para pagarles con un partido político, además de todo el poder que ya les había dado, pero más importantes qué piensa la presidenta Claudia Sheinbaum para cumplir ese compromiso de su mentor político.
La incógnita es si La Mayoría Silenciosa será capaz de votar por personajes de la vida militar, debido a su mala fama, su estructura de mando, sospechas de estar coludidos con los narcotraficantes, pero todo por su cercanía con Morena y la protección que hicieron de funcionario públicos y políticos que trafican droga, gasolina, petróleo y hasta armas.
Solo el tiempo dirá si fue premio o presión por parte del Ejército para que le dieran un partido y esas facilidades en la vida política del país. También sabremos si fue una buena idea o si en el corto plazo nos arrepentiremos de ello.
Por cierto, también les dieron el derecho a espiarnos y les entregaron la Guardia Nacional.
Crece la inconformidad en Morena
No solo es la entrega de cargos a personas políticos que vienen de otros partidos, también se sienten desdeñados, despreciados, lejos de los preceptos en los que alguna vez creyeron, por eso, la inconformidad crece de manera veloz en Morena; ven un partido y líderes que se han convertido en lo que siempre criticaron, corruptos, llenos de intereses, con tráfico de influencias, y protegiendo personajes de dudosa calidad moral.
La última incorporación del priista Carlos Iriarte molestó a muchos, desde el tlatoani de Texcoco, Higinio Martínez, hasta consejeros estatales a quienes la gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez les prometió cargos en la administración estatal a cambio de su voto para imponer a la líder mexiquense, Luz María Hernández. Saben que su administración está plagada de priistas a quienes les han respetado puestos y jerarquías que no se merecen. Pero lo mismo pasa en el gobierno federal, muchas dependencias están siendo manejadas por priistas, mientras los morenistas de pie, que trabajaron para llevar al poder a Obrador y Sheinbaum siguen sin tener ni siquiera un trabajo para financiar su actividad política o sus aspiraciones a un cargo de elección popular.
Acoso en el Ayuntamiento de Toluca
El acoso sigue siendo uno de los grandes males que hay en los entes de gobierno, el municipio de Toluca no es la excepción. Por ello, una de las afectadas se armó de valor para denunciar y en unos días dará a conocer el nombre de quien usa estás prácticas amparado por su cargo.
Veremos qué hará el presidente municipal de Toluca, Ricardo Moreno, ante este caso de acoso, protegerá al señalado o lo purificará en su conferencia semanal de La Toluqueña.
