El largo camino de Ricardo Anaya al 2024
**Obrador víctima de sus palabras**
**PAN y PRD pagan deuda al PRI con candidaturas**
El hecho de que Ricardo Anaya busque ser candidato a presidente de la República en el año 2024 y recorra el país para conocer sus necesidades sólo es un deseo, el largo camino para consolidar esta posibilidad será una larga travesía llena de incertidumbre, ataques políticos, negociaciones e intentos de fincarle responsabilidades por algunos delitos, incluso batallar para que no siga creciendo su desprestigio.
Es cierto que en estos momentos el PAN no tiene un cuadro con la suficiente fortaleza para enfrentar a Morena y sus aliados para el 2024, razón por la cual Anaya se está construyendo ese perfil con el objetivo de ser la opción de su partido y, si se puede de otros, para ganarle a Obrador y a Morena.
Apenas asomó la cabeza y las redes sociales se encargaron de recordarle su pasado, sus nocivas alianzas con Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray, los moches que recibieron para aprobar la reforma energética, su integración al Pacto por México y muchas cosas más que faltan por salir a la luz.
Para llegar a ese punto de tener la candidatura, Anaya primero tiene que ganar dentro de su partido, y si bien muchos piensan que tiene mucha capacidad para lograrlo y enfrentarse al candidato de Morena, se debe tomar en cuenta que Javier Corral, Pancho Domínguez, Juan Carlos Romero Hicks y Mauricio Vila, tienen un perfil más que aceptable para ser candidatos de Acción Nacional, aunque las elecciones dejarán en claro quiénes seguirán en el camino de la contienda.
Para empezar, Corral perdió la contienda interna para imponer a Gustavo Madero como su sucesor, lo cual debilita sus posibilidades; Pancho Domínguez todavía tiene que ganar la elección en Querétaro; Juan Carlos Romero Hicks tiene que decidir si quiere competir por la presidencia y el más fuerte de sus adversarios; Mauricio Vila, gobernador de Yucatán, quien ha realizado un buen trabajo en su estado, donde la seguridad es mucho mejor que en muchos estados del país, encabeza a los gobernadores de Acción Nacional, dentro de su estado tiene una buena percepción; joven al igual que Anaya; empresario; seguramente esperará su momento para entrar en la contienda o sumarse al proyecto.
Pero si dentro de Acción Nacional, Ricardo Anaya tiene competencia, La Mayoría Silenciosa, no quiere imaginar si el PAN hace una coalición con el PRD y el PRI, posibilidad palpable al tomar en cuenta las alianzas que se han hecho para este año electoral, mismas que pueden irse extendiendo al paso de los años para enfrentar a Morena y sus aliados en las elecciones estatales venideras.
Si bien el PRD solamente tiene dos candidatos, por cierto, muy desgastados para competir en la elección presidencial (Miguel Ángel Mancera y Silvano Aureoles), el PRI sacará una amplia lista para enfrentar a Ricardo Anaya, para empezar los gobernadores de Hidalgo y Coahuila, quienes ganaron de manera contundente las elecciones, después de ellos, Claudia Pavlovich y Alejandro Murat, que lleva una buena relación con el presidente López Obrador y; el mismo líder del PRI, Alejandro Moreno.
Si Ricardo Anaya quiere recorrer el país, debe tomar en cuenta que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) del gobierno federal se ha convertido en un brazo ejecutor del presidente López Obrador, por tanto, el financiamiento de su aventura debe quedar muy claro, para no tener problemas legales que lo dejen fuera de la contienda, como pasó en la anterior elección.
La Mayoría Silenciosa deberá estar atenta a los recorridos de Ricardo Anaya, sus propuestas, su proyecto y su capacidad para sacar adelante este país llamado México, que a gritos pide un poco de paz y desarrollo.
En el Gobierno de la República
Si bien es cierto que no se le desea el mal a nadie, también es cierto que el presidente Andrés Manuel López Obrador, fue víctima de su indiferencia, falta de precaución para cuidarse el COVID-19 y sus palabras. Su negativa para usar cubrebocas, su presunción para decir que sus amuletos lo protegían y peor aún, señalar que la enfermedad sólo le daba a los corruptos y mentirosos, demuestran que su conferencia mañanera sirve únicamente para exhibirlo.
López Obrador no ha tomado en serio su papel como presidente de México y es hora de que se cuide, debe entender lo que representa y la responsabilidad que tiene como mandatario, su estribillo de que todo le pasa a los corruptos, mentirosos y traicioneros, es momento de dejarlo en el pasado. Hay cosas más importantes para La Mayoría Silenciosa que su venganza contra La Mafia del Poder. Esperamos su pronta recuperación y una nueva forma de encarar los problemas por el bien de México.
En el Estado de México
Las posiciones logradas por el Partido Revolucionario Institucional a través de los acuerdos logrados con el PRD y el PAN en el Estado de México, no demuestran la fortaleza del PRI ni la habilidad del Alfredo del Mazo para lograr coaliciones exitosas para su partido, pero sí dejan en claro que tanto el PRD como el PAN le deben mucho al gobierno para pagarle con las candidaturas de la coalición.
Los partidos han sido utilizados una y otra vez para proteger al PRI en la Cámara de Diputados local y ahora han ayudado para que el PRI sea sobrevalorado en una coalición que los puede levantar del pie de la sepultura, sitio en donde se encontraban después de la elección del 2018.