MERCADO NAVIDEÑO EN BERLIN
MERCADO NAVIDEÑO EN BERLIN
Ivonne Sánchez Barea
Otra vez. De nuevo un yijadista arremete contra la población civil con un camión en un mercado navideño berlinés.
Las guirnaldas y los adornos quedaron colgados en la imaginación colectiva. A la vez, también se transmite en la televisión el asesinato del embajador ruso en Ankara. Nadie esperaba que un policía estuviera radicalizado.
El reloj que desde la iglesia en el centro de Berlín, se queda en parálisis, atónito de lo que la historia está escribiendo para el futuro. Dicen algunos que Europa ya está invadido por los musulmanes, Dicen que sólo les queda dominar los gobiernos. Dicen que ya están infiltrados en las líneas que nos protegen, y nos preguntamos igualmente ¿Dónde estarán infiltrados y quiénes son y quienes no son? Dado que hay radicales conversos, desconocemos donde están y hasta qué punto nos controlan. Son como drones humanos que circundan vigilando los movimientos de las personas. Sólo hay que observar a esos personajes que habitualmente se parapetan a observar y escribir, a controlar los movimientos desde una silla de una terraza de un café de cualquier ciudad europea. Dando órdenes a sus subalternos, y vemos que mientras unos vienen, otros van, se levantan de la silla de al lado, y como si fuese un confesor, la van trayendo información a diario a los controladores de lo que ocurre en la ciudad.
Todo un ejército silencioso, que tiene sus filas infiltradas en todas las latitudes y longitudes de las ciudades.
Su dominio sobre nosotros es conocer nuestros movimientos, nuestros hábitos, nuestras debilidades y se preparan como serpientes a la espera de atrapar sus presas, lentamente, sigilosos, observando nuestros templos: religiosos (Iglesias), de ocio (discotecas y restaurantes), de consumo (almacenes y tiendas), nuestros desplazamientos (Aeropuertos, estaciones).
El verano pasado le toco a Niza durante la celebración de la fiesta nacional, ayer, ha sido Berlín, en el pulmón de Europa. ¿Pretenden acaso que entremos en guerra abierta?
El gabinete de urgencia es convocado por Merkel, e incrementarán las medidas de seguridad, pero ¿Quién puede prever a esos individuos que atacan en solitario y dañan la estabilidad en nuestras naciones? Los políticos se detienen a especular, y reaccionan tarde… ¿Dónde están acaso, que no ven que ya no somos nosotros por nosotros mismo, sino que estamos bajo el control secreto de los observadores silenciosos? Las ratas salen de noche preferentemente, pero estas fieras solitarias, salen en cualquier momento, en cualquier lugar, sin discriminar, porque para ellos, el matar, forma parte de ganar su “paraíso celestial”
¡Ay qué pena!, ¿A dónde vamos a parar?